Por un lado al aforo de la Junta de Andalucía de 550.000 tn. en su territorio, se sumó el del Mapa, que a nivel nacional prevee unas 760.000 tn. de aceite de oliva en la campaña 2023/2024, y al que se suma el de la CE, con 1,500.000 tn. en la zona europea.
todas estas cifras lógicamente están por debajo de las medias de años anteriores, y es que el calor y las bajas precipitaciones en las zonas productoras, han hecho que estemos en esta situación.
Por otra parte, el miércoles también se conocieron los datos referentes al mes de Septiembre, y en consecuencia la situación final de la campaña 2022/2023, donde se arroja unas salidas de 75.000 tn. en el mes noveno, y quedando la producción con algo más de 80.000 tn. en sus bodegas y los envasadores, con 162.000 tn. Que con este contexto pues vemos claramente, que ambas posiciones son las mínimas que se pueden dar en el mes de Septiembre; los productores necesitan algo de aceite en sus bodegas, para envasados, suavizar los nuevos aceites, cautos en obtener aceites de calidad próxima campaña, y por otro lado los envasadores son cifras bajo mínimos, que deben de tener en sus instalaciones para el buen funcionamiento de su logística.
En definitiva esta semana ha sido hacer muchas cábalas y estar todos expectantes a estas cifras, pero en lo que todos coincidiremos es que estamos ante otra campaña como la vivida anteriormente con pocos aceites y con precios altos. Retrasándose la recolección por altas temperaturas y si ahora vienen lluvias, también lo harán para los que pretendían comenzarla en la segunda quincena de octubre. a lo que se mejoraría muy y mucho sería que las predicciones de lluvias que hay para la próxima semana se materialicen y que obre algo de optimismo de cara al agricultor y a todo el sector de cara a ver llenos pantanos y ver los olivares con humedad, sería una buena noticia para la próxima semana.